81Jesús marchó al Monte de los Olivos. 2Muy de mañana volvió de nuevo al Templo, y todo el pueblo acudía a él; se sentó y se puso a enseñarles.
3Los escribas y fariseos trajeron a una mujer sorprendida en adulterio y la pusieron en medio.
4—Maestro —le dijeron—, esta mujer ha sido sorprendida en flagrante adulterio. 5Moisés en la Ley nos mandó lapidar a mujeres así; ¿tú qué dices? 6—se lo decían tentándole, para tener de qué acusarle.
Pero Jesús, se agachó y se puso a escribir con el dedo en la tierra.
7Como ellos insistían en preguntarle, se incorporó y les dijo:
—El que de vosotros esté sin pecado que tire la piedra el primero.
8Y agachándose otra vez, siguió escribiendo en la tierra. 9Al oírle, empezaron a marcharse uno tras otro, comenzando por los más viejos, y quedó Jesús solo, y la mujer, de pie, en medio. 10Jesús se incorporó y le dijo:
—Mujer, ¿dónde están? ¿Ninguno te ha condenado?
11—Ninguno, Señor —respondió ella.
Le dijo Jesús:
—Tampoco yo te condeno; vete y a partir de ahora no peques más.
Texto de EUNSA (Universidad de Navarra)