211Al acercarse a Jerusalén y llegar a Betfagé, junto al Monte de los Olivos, Jesús envió a dos de sus discípulos, 2diciéndoles:
—Id a la aldea que tenéis enfrente y encontraréis enseguida un asna atada, con un borrico al lado; desatadlos y traédmelos. 3Si alguien os dice algo, le responderéis que el Señor los necesita y que enseguida los devolverá.
4Esto sucedió para que se cumpliera lo dicho por medio del Profeta:
5Decid a la hija de Sión:
«Mira, tu Rey viene hacia ti
con mansedumbre, sentado sobre un asna,
sobre un borrico, hijo de animal de carga».
6Los discípulos marcharon e hicieron como Jesús les había ordenado. 7Trajeron el asna y el borrico, pusieron sobre ellos los mantos y él se montó encima. 8Una gran multitud extendió sus propios mantos por el camino; otros cortaban ramas de árboles y las echaban por el camino. 9Las multitudes que iban delante de él y las que seguían detrás gritaban diciendo:
—¡Hosanna al Hijo de David!
¡Bendito el que viene en nombre del Señor!
¡Hosanna en las alturas!
10Al entrar en Jerusalén, se conmovió toda la ciudad y se preguntaban:
—¿Quién es éste?
11—Éste es el profeta Jesús, el de Nazaret de Galilea —decía la multitud.
Texto de EUNSA (Universidad de Navarra)