141»No se turbe vuestro corazón. Creéis en Dios, creed también en mí. 2En la casa de mi Padre hay muchas moradas. De lo contrario, ¿os hubiera dicho que voy a prepararos un lugar? 3Cuando me haya marchado y os haya preparado un lugar, de nuevo vendré y os llevaré junto a mí, para que, donde yo estoy, estéis también vosotros. 4Y adonde yo voy, ya sabéis el camino.
5Tomás le dijo:
—Señor, no sabemos adónde vas, ¿cómo podremos saber el camino?
6—Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida —le respondió Jesús—; nadie va al Padre si no es a través de mí. 7Si me habéis conocido a mí, conoceréis también a mi Padre; desde ahora le conocéis y le habéis visto.
8Felipe le dijo:
—Señor, muéstranos al Padre y nos basta.
9—Felipe —le contestó Jesús—, ¿tanto tiempo como llevo con vosotros y no me has conocido? El que me ha visto a mí ha visto al Padre; ¿cómo dices tú: «Muéstranos al Padre»? 10¿No crees que yo estoy en el Padre y el Padre en mí? Las palabras que yo os digo no las hablo por mí mismo. El Padre, que está en mí, realiza sus obras. 11Creedme: yo estoy en el Padre y el Padre en mí; y si no, creed por las obras mismas. 12En verdad, en verdad os digo: el que cree en mí, también él hará las obras que yo hago, y las hará mayores que éstas porque yo voy al Padre. 13Y lo que pidáis en mi nombre eso haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo. 14Si me pedís algo en mi nombre, yo lo haré.
Texto de EUNSA (Universidad de Navarra)